Los síntomas como malos olores y sabores extraños de los alimentos, pueden corresponder a alteraciones a nivel nasal como crecimiento de los cornetes que son como unos cojines internos; éstos se inflaman y pueden tapar la nariz, también en la cara tenemos unos huecos llamados senos; éstos se pueden llenar de moco y producir mal olor, y secundariamente, cambia el sabor de los alimentos; se aconseja consultar al otorrinolaringólogo para que le examine y determine manejos.