No son necesarias acciones adicionales salvo al lavado genital diario con abundante agua y jabón, siempre retrayendo el prepucio en su totalidad. Esto lo debe realizar diariamente cada vez que se bañe o realice aseo genital. Los residuos se irán desprendiendo gradualmente sin mayor problema, puede emplear agua tibia con precaución para ayudarse en el aseo.
No debe preocuparse, pero si esto genera ansiedad importante no dude en acudir a valoración médica donde se podrá reafirmar la ausencia de peligro.
Estamos atentos a cualquier inquietud.