La recomendación es usar ropa interior de algodón, no ajustada al cuerpo; la razón es que los testículos necesitan una temperatura ligeramente menor que la del cuerpo para la generación de espermatozoides y testosterona; a largo plazo la ropa interior ajustada puede generar problemas de infertilidad masculina, y problemas de irritación en la piel por el calor, humedad y contacto.