Sólo su médico puede cambiar el tratamiento teniendo en cuenta que el manejo de este tipo suele ser muy específico y bajo estricta supervisión médica. El mal uso de antibióticos sólo puede derivar en complicaciones para la salud personal y pública.
Se considera que de este antibiótico sólo una muy pequeña cantidad pasa a la leche y adempas la absorción en el intestino del niño estaría dificultada por el calcio presente en la leche. De todas maneras por lo general se prefieren otros fármacos del mismo grupo para aún menos excreción.
Recomiendo mantener una buena comunicación con su médico.