Puede comer lo que le guste. No hay una limitación respecto al tipo de alimentos que puede consumir un niño con fiebre tifoidea, tampoco hay una especificación respecto a un grupo preferencial de alimentos que debería llevar.
Lo recomendable es que mantenga una alimentación balanceada, rica en proteínas, frutas y verduras, variada y evitando el exceso de dulces, refrescos o comida chatarra. Si en estos momentos presenta malestar, ofrezca su alimento favorito, evite comidas muy pesadas ricas en azúcar o grasas, asegure una buena hidratación incrementando la ingesta de líquidos u ofreciendo caldos durante las comidas.
Es importante asegurar una correcta manipulación de los alimentos, que la persona que los prepara lave bien sus manos, lavar los productos y cocinarlos correctamente.