La eficacia de los anticonceptivos orales, cuando se utilizan adecuadamente es buena (menos del 1% de embarazo), pero esto implica que deben tomarse los anticonceptivos todos los días a la misma y no se puede perder ninguna dosis. La eficacia de las inyecciones es similar. La diferencia radica en cuál método es más fácil para el paciente y con cuál método es más adherente. No hay problema si se venía con el método inyectable al cambiarse por las pastillas.